"Las
naciones capitalistas modernas son el fruto de una historia de esclavitud,
genocidio, violencia y explotación tan abominable como las de China de Mao o la
Unión Soviética de Stalin. También el capitalismo se forjó a base de sangre y
lágrimas; la diferencia está en que ha sobrevivido lo bastante como para
relegar al olvido buena parte de ese horror,…
…
decenas de millones de personas indias, africanas, chinas, brasileñas,
coreanas, rusas y de otras nacionalidades que murieron a finales del siglo XIX
como consecuencia de hambrunas, sequías y enfermedades perfectamente
prevenibles. Muchas de aquellas catástrofes fueron resultado directo de la
aplicación del dogma del libre mercado, como cuando (por ejemplo) las alzas
galopantes de los precios del cereal disparaban los alimentos básicos fuera del
alcance de la gente corriente."
Terry Eagleton